No podemos andar por la vida temiendo perder lo que ya tenemos y amamos, debemos vivir seguros de nuestras decisiones y con plena confianza de que seremos felices. Nada garantiza que lo seamos, pero no lo sabremos si no lo intentamos; no debemos dejar de hacer las cosas por miedo a las posibilidades que están en nuestra contra, debemos arriesgarnos sensatamente a todo, debemos probarlo todo, debemos dejarnos llevar por lo que nuestros corazones dictan como verdadero, necesario y correcto. Lo peor tal vez se presente, pero si valoramos lo que ya tenemos desde un principio, entonces será tan especial que nada podrá quebrantarlo, nada logrará quitárnoslo.
viernes, 30 de mayo de 2008
Y te quiero a ti
No podemos andar por la vida temiendo perder lo que ya tenemos y amamos, debemos vivir seguros de nuestras decisiones y con plena confianza de que seremos felices. Nada garantiza que lo seamos, pero no lo sabremos si no lo intentamos; no debemos dejar de hacer las cosas por miedo a las posibilidades que están en nuestra contra, debemos arriesgarnos sensatamente a todo, debemos probarlo todo, debemos dejarnos llevar por lo que nuestros corazones dictan como verdadero, necesario y correcto. Lo peor tal vez se presente, pero si valoramos lo que ya tenemos desde un principio, entonces será tan especial que nada podrá quebrantarlo, nada logrará quitárnoslo.
lunes, 19 de mayo de 2008
Azar de los azares - Parte I
El destino es esa fuerza misteriosa que nos rodea siempre, que define nuestro actuar y que posee el poder de hacernos felices. No obstante, este no se presenta de manera arbitraria ni nos obliga a tomar el camino que está decidido para nosotros, sino que tenemos la capacidad de optar, existe un libre albedrío. Suponiendo que esto último sea cierto, la idea de un destino se torna borrosa, lo sé, pero las personas suelen pensar en absolutos la mayor parte del tiempo, siempre moviéndose entre los polos opuestos y olvidan los puntos medios: el destino es la fuerza que nos lleva hasta el lugar, hasta el momento, hasta la situación, y nos dice “el resto depende de ti”. Con esto quiero decir que el libro de la vida está escrito con lápiz, que es posible escapar de nuestro destino o, en todo caso, que es posible elegir lo que nos depara, al menos hasta cierto punto. Las decisiones que tomamos determinan nuestro curso de vida, y el destino se moldea a nosotros de acuerdo a esta; es solo cuestión de saber qué elegir y atenerse a los riesgos y consecuencias que aquella elección supone. Hay una frase que me encanta y que resume lo que siento: “En el camino de la vida lo importante no es llegar al otro lado, sino perderse entre las posibilidades del 'durante' ”.
sábado, 19 de abril de 2008
Mochileros del tiempo
Pero, de ello nada sirve si no lo comparamos con la realidad actual, es decir, ¿como sabemos que si por ejemplo tomamos determinado automovil o comemos tal cual alimento vamos a desviar algo mas adelante? En este punto la definición de destino encaja cual engranaje en un reloj y surge una nueva serie de interrogantes: ¿existe el destino?, si existiese ¿quien lo trazó?, y por último, si está trazado, ¿cualquier acción que tome ya estará delimitada por tal y por ende cualquier desición que tome para desligarme de este principio ya es de por si un paso escrito?
Desde mi perspectiva, las paradojas que surgen cuando incluimos a tal elemento pueden ser como no pueden ser legítimas. En ello, comparemos y veamos: si fuésemos y viésemos el futuro eso indica la veracidad de tal, pero si retrocedemos en el tiempo, ¿podemos afirmar que nosotros somos el destino en un punto de nuestra existencia, o lo que hacemos, con quien interactuamos y vivimos es producto de nuestros actos en el pasado que moldearon a su gusto nuestro presente?
viernes, 18 de abril de 2008
Ese "no-sé-qué" - Parte II
Aún suelo hacer juicios acerca de personas que no conozco basándome en la forma como se ven, y aún me equivoco en cada uno de ellos (ya no tanto), lo que prueba que lo de afuera no define lo de adentro. Después de conocer a alguien, después de tratarla y entenderla, lo físico es apenas un accesorio de lo que es la persona; físicamente podrán hacernos compañía y estar ahí en los momentos divertidos y no tan divertidos, pero no es el cuerpo el que nos hace querer estar junto a la persona, no es el cuerpo del cual nos encariñamos y a quien aprendemos a querer (al menos hablo desde mi perspectiva).
Lo estupendo de las personas es que son únicas, no solo se ven diferentes sino que también actúan diferente, y eso le da una variedad increíble al mundo en el que vivimos (a veces encontraremos a alguien que nos desagrade, pero es cuestión de aceptarlo tal y como es o, en el mejor de los casos, entenderlo; todavía me cuesta poner esto en acción). No podría decir que prefiero a ciertos tipos de personas, pues disfruto de todos (para ser honesto, probablemente no en igual medida, pero eso no es importante), y creo que cuando hablamos de belleza mental nos es más difícil hallarla en la práctica, pero justamente por eso debemos seguir buscando y conociendo más y más.
jueves, 17 de abril de 2008
Ventanas al alma, puertas al corazón
Retomando lo anterior, esta semana me he dedicado a hacer una especie de pseudo-análisis/estudio del “arte de evitar miradas” (suena bonito). Yo era el tipo de persona que, en la universidad, solía escabullir la mirada para no saludar a personas conocidas pero no muy agradables que se cruzaban en mi camino, pero ahora hago lo contrario, me quedo mirándolas y me divierto al ver cómo son ellas las que me evitan a mí creyendo que no sé que me han visto; luego de verme miran repentinamente hacia otro lugar, a veces como si algo asombroso hubiese llamado su atención (ha sucedido que voltean la vista hacia una pared que no tiene nada o hacia el techo; ¿habrán visto algo que yo no?). Seguiré averiguando más de estas conductas tan particulares que tenemos los humanos; tal vez me encuentre con otro tema más para agregar a la lista de temas por usar en mi futura tesis.
Retroceder nunca,...
Con referente al párrafo anterior, y abriendo nuevos canales de debate, un amigo mencionó un tema en un artículo de este mismo blog aludiendo a una posibilidad de retroceder en el tiempo. Sin lugar a dudas creo que es una pregunta que nos hemos formulado una gran mayoría, y a los que no sería recomendable que lo hiciesen puesto que se van a encontrar con una serie de deducciones lógicas muy interesantes. Volviendo al tema, el primer axioma de esta teoría sería el de que si cambiamos algo del pasado la realidad "actual" ´se tornaría completamente diferente. Pero, ¿bajo que circunstancias(sea un pequeño o gran cambio) afectaría de tal manera nuestra visión contemporánea del presente?
Esta es uno de los tantos artículos que dedicaré a la búsqueda del conocimiento, mas no del saber sobre el tiempo. ¿En que medidad lo entenderemos? Es algo que él mismo nos dirá, supongo.
miércoles, 16 de abril de 2008
Máquinas del tiempo personales
martes, 15 de abril de 2008
Ese "no-sé-qué" - Parte I
Personalmente, en primera instancia me derrito con los ojos y casi todo lo relacionado a ellos, y luego me fijo en las otras facciones de su rostro, terminando con los demás rasgos de su cuerpo; admito que me atraen ciertos tipos de cuerpos, pero trato de no ponerlo por encima de una bella faz y menos por delante de una genial personalidad. No hay mejores ni peores, solo diferentes.
Coorporaciones ilegítimas
lunes, 14 de abril de 2008
Obstáculos en el camino
Me explico. Cuando era pequeño (más pequeño) siempre me pregunté el por qué de esas franjas a lo largo y ancho de las veredas, hasta que alguien me contó que era para que, debido al calor del sol, se expandiesen sin llegar a quebrarse. Y claro, esa respuesta me satisfizo por un buen tiempo, hasta que comencé a darme cuenta de una particularidad humana que me hizo replantearme la pregunta y hacer a un lado la anterior respuesta (que es relativamente cierta, pero no explica las cosas en su totalidad). Las personas suelen caminar (ojo que no digo ‘solemos’) por uno de los dos lados que crea la división a lo largo de la vereda (considerando que solo haya una división, o sea, que sea una vereda poco ancha), y eso me pareció muy práctico, pero pienso que sería mucho mejor reflexionar al respecto para no realizar actos sin antes pensarlos.
Como esta “regla natural” no me gusta mucho (porque las personas la siguen sin meditarla) decidí inventar este juego del que les hablaré. Consiste no en caminar por uno u otro lado, sino por el medio, por encima de la línea, de tal manera que la regla no se me aplique. El hacerlo ocasiona que interrumpa un poco el paso de los demás peatones, pero no puedo negar que es divertido la mayoría de veces, y fue así como surgió un juego mucho más entretenido y que requiere más estrategia. Cuando un peatón venga en sentido contrario debemos ponernos en su mismo lado de la vereda e intentar que este cambie al otro “carril” de cualquier manera posible, pero sin detenernos y sin pronunciar palabra alguna. Es muy emocionante, y no puedo decir que siempre gano, pero son pocas las veces que he perdido y solo una la que he empatado (tendrán que hablar conmigo personalmente para que les cuente a qué me refiero con eso). Los animo a intentarlo.
sábado, 12 de abril de 2008
¿Et lux in tenebris lucet?
jueves, 10 de abril de 2008
Literalmente un saber universal
Primero trato de conseguir un asiento junto a una ventana y luego dejo que mi mirada deambule por las calles hasta encontrar distintos tipos de personas (no me concentro en rubias con cuerpos esculturales; misteriosamente no se ven muchas por la vía pública), alguien que capte mi atención de manera inconsciente y que me haga pensar diferentes cosas. Por lo general comienzo intentando descifrar la edad de la persona y de ahí me traslado a ámbitos más personales de su vida, en los cuales reflexiono en base a preguntas concretas, preguntas como estas: ¿adónde irá?, ¿estudiará?, ¿trabajará?, ¿estará casado(a)?, ¿tendrá hijos?, ¿dónde habrá nacido?, ¿qué habrá vivido?
Hay algo particular que me encanta de esto, y eso es comprender que personas las hay por montones, y experiencias las hay en mucha mayor cantidad. Siento unas ganas increíbles de nutrirme con las vivencias de cada ser humano, de conocer de su vida en tanto me sea posible, de descifrarlo no como se haría con un acertijo o una adivinanza, sino como una criatura llena de misterios y conocimiento adquiridos a lo largo de su existencia, sea esta larga o corta. Hay mucho por aprender y muchos de quién aprenderlo.
miércoles, 9 de abril de 2008
El monstruo que amo
Trataré acerca de un monstruo. Un monstruo muy malvado que me ha acosado mentalmente durante varios meses. No me lo puedo sacar, se ha enclavado en mi cerebro y pensar en disolverlo es técnicamente imposible. Me siento incapaz de realizar algo por mí mismo, todo lo hago dependiendo de ese ser maligno. No tengo palabras para describirlo, sólo sé que existe porque de él me valgo para todo lo que realizo. Me siento obligado a complacerlo, como si su satisfacción fuese la mía. Repito, no tengo palabras para describirlo... es desconocido tanto en su forma como en su materia. No le encuentro adjetivo que encaje dentro de sus características, sólo sé que existe, que vive dentro de mí y que, además, no me quiere dejar... aunque, tal vez, en verdad sea yo quien no quiera dejarlo.
Esta semana ha sido muy productiva para mí, la he pasado muy bien con mis amigos de la universidad y he estudiado como debía. Me siento capaz de realizar cualquier cosa, siento aires de mejoras en el futuro. Después de varios meses de frustración y derrotas, veo una luz que me hace asumir que las cosas me saldrán mejor en los próximos días. Hay muchas personas a las que les debo este sentir, unas más que otras. Siempre existen jerarquías para este tipo de agradecimientos, más allá de que uno trate de meter al mismo saco a todas las personas como si hubiesen hecho el mismo esfuerzo para que yo alcanzara mi momentánea felicidad. Basándome en esa idea, es que encuentro a una única persona causante primordial de este sentimiento glorioso. Esta persona es alguien que se me ha quedado clavada en la cabeza y no puedo sacármela. Ya han pasado varios meses desde que se instaló y, al parecer, no tiene intenciones de mudarse. Tratar de no pensar en ella, se me es técnicamente imposible porque cuando lo hago ya no quiero dejarlo de hacer y sigo haciéndolo, cada vez con más placer... más placer... mucho más placer... hasta que me doy cuenta que el pensarla sólo me construye un mundo asumido que, aunque siempre me favorezca y yo sea el ganador, sé que es ficticio y lejano. Soy consciente de su lejanía, y soy consciente de que, tal vez, no me baste con lo actual para vivirlo. Pero, aunque suene utópico y extremadamente entusiasmado, yo no me rindo y le sigo pa'lante, me valgo de esa persona para alcanzar mis metas. Es mi inspiración en la realidad, que con una sonrisa puede hacerme lograr todo lo que yo quiero realizar. Es por esto, que me siento obligo a complacerle y a tratar de que su existencia sea más agradable que la mía. Aunque todo suene bien, no encuentro palabras para describirle... le conozco en forma y materia, pero ni aún de esta manera soy capaz de describirle. Adjetivos sobran y sobran más mis ganas de darle un lugar dentro de mí. En verdad, esta persona es mi monstruo que no me ha dejado pensar con voluntad, que me ha acosado desde hace un tiempo y que se ha instalado en mí. Esta persona monstruosa es mi causa por la que hallo felicidad, y no quiero dejarle. Tal vez, somos uno solo. Ese es el monstruo que amo, y también por el cual vivo.
lunes, 7 de abril de 2008
Oh Finis Oh Terra Parte 1
Destiempos
Continúo pensando hasta que me doy cuenta de que la chica con la que “estoy” conversando por msn no me ha contestado después de casi 20 minutos desde la última frase que escribí. Supongo que las experiencias que le conté acerca de mi madre no son tan eficientes como anzuelo para pescar una conversación interesante y más profunda. Pensaré en qué escribirle. Oh! Me contestó. Uhmm; dejé comment, me dice. No entendí muy bien la expresión. Trato de descubrir su intención con esas palabras. Adivina adivinador. Pues le diría que he estudiado para mago, no sé hasta qué punto uno podría servir de adivino. Pero, atiné precisamente con la respuesta. Un comment en el blog. ¿Un comment? ¿Dijo un comment? El primero y es para mí. Más allá, de que ella sea mi amiga y lo haya escrito porque somos bien cuates, pues es el primer comment y me lo hicieron a mí, no a dirole ni a vicio ni a miguel (el nuevo, que por cierto no saldrá en el logo…por llegar tarde), sino a mí. La emoción puede hacer que la intención inicial de este post tome otros rumbos. Sí, eso podría pasar. Aunque, no.
Suerte con el blog! que todo les salga chvre =D! Ese es el comentario que mi querida amiga me dedicó. Simple, pero alentador. Corto, pero cómico. Clásico en ella. La chica de comentarios que producen inspiración y de frases crudas sobre la realidad, mayormente se produce mucha crueldad cuando le echamos un vistazo a mi realidad. Ella se encuentra, tal vez, en el estado perfecto de las personas, donde ni se fantasea mucho ni se pisa de una forma tan arraigada sobre la tierra. Envidio su cordura y sus bromas. También envidio su sonrisa. Lalala. Mucha información. Eso pensaría. ¿El lunes almorzamos en Central, no? Ahora, vuelvo a darme cuenta de que han pasado varios minutos más y no me ha vuelto a contestar después del “gracias” que le había dejado en la ventanilla del Chat luego de tan inesperado comentario. Pues, supongo que no debo darle más al tema. Volvamos a mi cuarto, no está muy arreglado. Supongo que la escoba no ha querido regresar después de los exhaustos tres días seguidos de limpieza de diciembre del año pasado. ¿Por navidad? Pues, sí. Por qué más lo haría. Feliz Navidad ma’, no te preocupes no dejé entrar visita al cuarto, ya sé que es vergüenza familiar.
Vuelvo a pensar en la escoba, no tengo pensado rogarle que venga. Ni mucho menos ir a recogerla. ¿Orgulloso? Sí, no me va a ganar, esta vez mi cuarto tendrá el toque artístico que siempre quise que tenga. Supongo que el hecho de ser fanático de spiderman no debería manifestarlo con tantas arañas en el techo; pero, es mi orgullo hacia la escoba tan fuerte lo que me deja sin opción. Total, sólo me son necesarios los siguientes miembros del cuarto e hice la lista para que la escoba, aún caprichosa y mediocre sin intención de ir por la hazaña en mi cuarto por segunda vez, se entere de que no está en ella: el ventilador, debido al intenso calor ya expresado al principio del post; la cama, suele soportarme en las noches y evitar que coja un mal sueño, y me es eficiente aunque tenga muchos huecos y ya sea algo viejita (la extrañaré si algún llega a convertirse en aserrín); la tv, dónde más podría ver los partidos del cienciano sin que nadie de mi casa me joda por ser hincha de ese equipo, luego de haber gritado “Y dale U” cuando mocoso con mis tíos en el monumental frente a Oriente Petrolero por la Libertadores (todos en casa son gallinas y no toleran burros); y, por último y no por eso el peor miembro de mi pequeña familia de mi cuadrangular mundo conocido como cuarto, la computadora, es más, debe ser el miembro más importante, es mi conexión con el mundo sensible y mi único medio de superación vital, sin ella tal vez no existiría. ¿Qué estaría siendo de mí, si no hubiesen inventado la computadora? Es tanto el extremo de mi favoritismo hacia ella que cuando interactuamos, lo hacemos como un solo ser sincronizado. Una especie de bipartición maligna dispuesta a hacer maldades que en la realidad objetiva y no-virtual no me atrevería (yo) ni podría (ella) lograr.
Finalizando este segundo post en mi cuenta personal y décimo o decimoprimero de la cuenta general del blog, me gustaría dejarles con una imagen, la cual prometí en el primer post que realicé. Esta es un dibujo, espero lo entiendan.
La muerte al alcance de la boca
Ya no se trata únicamente de la salud de los propios consumidores, sino de la de aquellos que están limpios de ese vicio pero que igual lo respiran a causa de los insensibles fumadores. Y no olvidemos el medio ambiente, principal víctima del abuso del tabaco, destruido de a pocos como los pulmones de esa gente adicta que poco le importa el resto. Y ¿qué dicen ellos?: “De algo vamos a morir”. Lo que siento al oír este tipo de respuestas es una pena terrible por estas personas que saben que están matándose a sí mismas y a los demás y hacen muy poco por evitarlo; primero son ellas, los demás pueden cuidarse solos, ¿no es verdad?
Es aún más lamentable cuando amigos cercanos se dejan intoxicar por la nicotina sin oír nuestros consejos, absortos en su propio goce, atrapados en la adicción y en el placer psicológico que pueden estar recibiendo (y digo psicológico porque todo está en la mente, no es un placer real). A veces tengo muchísimas ganas de conseguir una lista con todas las maldades del cigarrillo, del tabaco y la nicotina en general, y decirles “de esto vas a morir, de alguno de los más de quince cánceres, de un ataque al corazón o, peor aún, de enfisema; y no solo tú, sino también aquellos a los que expones con tu vicio”.
Tal vez no pueda detener la venta o el consumo de cigarrillos, pero sí puedo impedir que mis amigos los fumen (podrán comprarlos, pero el hacerlo ya supone una pérdida por más que se los quite o no). Romperé cada uno feliz de ayudarlos no solo a ellos, sino a mí mismo y a todas esas personas sensatas que no fuman; no se me ocurre una mejor labor social que esta.
domingo, 6 de abril de 2008
nihilismo en Nietzsche: anuncio los límites de la modernidad contemporánea
El tema del nihilismo en Nietzsche plantea el advenimiento de muchas frustraciones que desembocan en el abandono de los valores del pasado. Estos son inútiles, le pesan porque el mundo, los hábitos y las costumbres son otros así que como estos valores ya no satisfacen nuestras necesidades, nuestro espíritu empieza a luchar contra ellos mediante la crítica para destruirlos. Pero, no es suficiente con destruir estos valores antiguos, también es necesario destruir los parámetros por los cuales estos fueron creados, ya que si medimos el valor de mundo con los mismos parámetros que utilizamos para crear esos valores del pasado. Esos parámetros son el fin la unidad y el ser. Un primer resultado de la crítica es la desilusión, ya que lo único que se a hecho es destruir lo antiguo pero no hemos creado lo nuevo. Se esta en un momento en que no se tiene valores morales. Al destruir todo lo antiguo la persona se queda en la nada, con falta de objetivo, de criterio de conducta y de orientación. Donde ya no existen los antiguos parámetros pero tampoco los nuevos, y este es el clímax del nihilismo. El momento en que el hombre debido a la voluntad de poder, en otras palabras al instinto de sobrevivir, crea nuevos valores que pueden satisfacer sus necesidades y en este momento es el que se sale del nihilismo. Esto proceso lo explica nietzsche en las tres transformaciones, donde el espíritu que carga con todos los valores antiguos viene a ser el camello, luego este camello se transforma en león, que lucha contra los antiguos valores, lucha contra el dragón del “Tu debes” y el león representa el “yo quiero”. Una vez que el león logra destruir los valores del pasado, queda en libertad, pero todavía no puede crear los nuevos valores, ya que tiene que convertirse en niño para recién poder crear los nuevos valores por su inocencia, porque cree en su propia moral y sigue sus propios valores.
Según plantea Nietzsche, hay dos clases de nihilismo activo y pasivo. El nihilismo pasivo cuando se lleva a cabo el abandono de lo valores, y al darse cuenta de la invalidez del mundo se deja morir. En cambio, el nihilismo activo es el que destruye mediante la crítica, destruye los valores antiguos y puede llegar mediante la voluntad de poder a crear los tan esperados nuevos valores.
El nihilismo tiene también etapas y estas son tres. Una primera etapa es la desilusión frente al devenir. El hombre se da cuenta de la finalidad frente al cambio, frente a la muerte. Otra de sus etapas es la que consiste en insertar la individualidad en la totalidad., se da cuenta que el hecho de identificar a todos los humanos como un conjunto es una ficción. No existe tal conjunto de individuos que compartan las mismas cualidades se pone a la totalidad frente a la fragmentación. Por ultimo, se plantea una vida después de esta vida, ya que acá todo muere, todo es fragmentado creamos otro mundo en el que mueres y vuelves a nacer. El hombre se da cuenta que “el otro mundo” es una ficción que corresponde a una verdad psicológica que consiste en valorar la vida humana y este valorar la vida es producto de la voluntad de poder.
El nihilismo significa que dios esta muerto, es decir que el conjunto de ideas y valores que garantizan la dominación de la decadencia revelan la nada en que escondían su fundamento. Tal crisis no nos encierra en lo irremediable. Nos conduce mas bien a sondear los orígenes de la ideología que ha sancionado la promoción de la decadencia, para que podamos después inventar lo valores que celebraran la vida auténticamente creadora. Nietzsche busca el cambio de todos los valores para poder sustituir a la humanidad decadente por el superhombre.
Todos los dioses están muertos, lo que nosotros queremos en el presente, es que el superhombre viva”; tal vez será un día en el gran mediodía nuestra voluntad suprema (Zaratustra)
Este superhombre que desprecia como malo todo aquello que es fruto de la cobardía, el temor, la compasión, todo lo que es débil y disminuye el impulso vital. Se aprecia como bueno, en cambio, todo lo superior y altivo, fuerte y dominador. La moral de los señores se basa en la fe en sí mismo, el orgullo propio. Por el contrario, esta el ultimo hombre que deformado y envilecido frente a la catástrofe de la muerte de dios escoge sumirse en el pantano del “bienestar” en breve, el hombre que se cree “listo” porque prefiere gozar mas que combatir.
Esto puede reflejar como los débiles están subordinando a los fuertes mediante la educación y mediante la religión. Esta educación disfrazada con la bandera de un mejoramiento moral del hombre trata de domesticarlo; de transformar las naturalezas enérgicas y apasionadas, en bestias de regaño laboriosas, dóciles y mediocres
Por otro lado nietzsche va a criticar la idea de sustancia y el cogito de Descartes “Yo pienso luego existo”
El error esta en pensar que ese salto que yo doy por este habito gramatical nos va a explicar algo del mundo. La idea de sustancia en la modernidad es solamente una hipótesis, ficción. Responde a un instinto de explicación, de hacernos más útil el mundo, consecuencia de un hábito gramatical que genera mediante el lenguaje átomos, sujetos, agentes.
De ahí parte la noción de causalidad, del hecho de que nosotros constantemente buscamos un actor, un agente, un sujeto. La causalidad funciona para encontrar un sujeto. Esta costumbre nos lleva a obviar detalles. En este obviar detalles nuestro juicio causal es un juicio burdo, insuficiente, porque pierde de vista lo detalles.
La consecuencia causal en general es una ficción, es simplemente una herramienta que nos sirve para ordenar el mundo, es decir una hipótesis. La causalidad es una formula alegórica que es tan metafórica como la poesía. Por consiguiente, si la causalidad como juicio científico es una formula metafórica, entonces la verdad científica no tiene nada de científico y no puedo pretender entonces que el conocimiento científico tenga más credibilidad que la magia.
Nietzsche advierte el hecho de que la argumentación cartesiana no transcurre sobre una tabula rasa, sino que asume desde el principio como verdadera una ontología substancialista:
Se piensa: luego hay algo pensante: así concluye la argumentación de Descartes. Pero esto significa presuponer ya como verdadera a priori nuestra creencia en el concepto de sustancia.
Descartes no se contento con constatar la existencia de pensamientos o representaciones, la realidad fenoménica de la actividad mental, sino que introdujo subrepticiamente la existencia de un portador substancial, un ‘sujeto’ al que atribuir los contenidos mentales. Dando un paso más, Nietzsche descubre en tal introducción un postulado lógico metafísico implícito en la gramática de todo lenguaje que contiene la estructura sujeto predicado.
Modernidad contemporánea
Más vertiginosa es la nueva oleada de cambios cuya ilustración grafica es el derrumbe del muro de Berlín. Allí no solo caen lo socialismo reales: toda imagen de totalización social se revela inoperante. La muerte de Dios que vaticino Nietzsche, tiene su acontecimiento emblemático un siglo después, cuando todo el orden del este cae sin que poder alguno puede evitarlo.
Esta es una sociedad que, lejos de exaltar los ordenes superiores, los eufemiza y lo descredibiliza, una sociedad que desvaloriza el ideal de abnegación estimulando sistemáticamente lo deseos inmediatos, la pasión del ego, la felicidad intimista y materialista (…) la cultura cotidiana ya no esta irrigada por los imperativos del ser sino por el bienestar y la dinámica de lo derechos subjetivos.
La nueva oleada secularizadora tiene un efecto disolvente que es difícil rastrear en sus versiones precedentes. Entiendo aquí por secularización la lucha del sujeto moderno por liberarse de perjuicios, mitos y costumbres y ganar en esta lucha la libertad requerida para crearse una nueva imagen de si mismo. Secularización radical doble filo: libera al sujeto de todo relato que obstruya su poder para redefinirse a discreción y construir su propia visión del mundo; pero por otro lado sumerge a ese mismo sujeto en la orfandad que dicha libertad supone.
Intelectual o no, ningún ser humano viviente en occidente de fin del siglo xx escapa a esta angustia de perdida de todo sentido, al desvanecimiento de la vida privada, de la capacidad de ser sujeto, por obra de las propagandas y publicidades, por la degradación de las propagandas y publicidades, por la degradación de la sociedad en masas y del amor en placer
Mucho mas que una confesión de ateismo, esta proclamación implica varias otras muertes: es la muerte de un sujeto que se autodefine como criatura, efecto o analogía de un principio que lo trasciende desde el comienzo; la muerte de la metafísica, entendida como perspectiva que establece la distinción categórica entre conocimiento verdadero y falso, entre lo esencia y lo aparente, entre el sujeto y el mundo, y entre el pensamiento y fenómeno; la muerte del principio que garantiza la certeza y la posibilidad de la unidad interna en el sujeto, llámese ese principio Razón o conciencia, la muerte de la historia como marca ascendente hacia un orden superior y con ello del principio que permite derivar hacia el futuro la promesa de una redención individual en un reencuentro universal: la muerte del mito moderno del progresivo dominio de la acción personal sobre las condiciones externas que inciden en su desarrollo., la muerte de la certeza y autoconfianza del yo: “mi hipótesis, propone nietzsche, el sujeto como multiplicidad. El sujeto, el objeto, el atributo- tales distinciones son inventadas y ahora se imponen como un esquema sobre todos los fenómenos de la apariencia-. La observación básicamente falsa es que yo crea que soy yo quien hace algo, sufre algo, tiene algo tiene alguna cualidad. El sujeto es la ficción según la cual una serie de estados similares en nosotros constituyen el efecto de un sustrato: pero somos nosotros quienes primero hemos creado la similitud de estos estados.
Apolo y Hermes: análisis de una lucha en la virtualidad
El mal uso de las vías virtuales de comunicación encuentra sus raíces mucho antes de su aparecimiento. Como es sabido, las distintas culturas en la antigüedad han representado siempre, en algunos de sus cuadros, la exaltación humana por lo erótico. Dicho impulso hermético tomó forma con el tiempo y caló en las distintas eras de nuestra civilización. Así pues podemos verlo materializarse en construcciones ancestrales como Los templos eróticos de Khajuraho. En el transcurso del tiempo las modificaciones que adoptó el erotismo ahondaron sin lugar a dudas en la visión humana de definir el deseo sexual. De esta manera, es acorde referirse pues al mito de Pigmaleón, quien se enamora perdidamente de Afrodita por vislumbrar su tobillo y decide hacer una imagen de ella. Sin embargo, como es de esperarse la estatua no responde a sus lamentos y, al sentir pena por él y siendo diosa, Afrodita le da vida a la obra de tal escultor.
En manera comparativa, lo que refiere hoy la visión de la pornografía se puede interpretar desde la posición de Pigmaleón en el mito, es decir, aquel deseo de no poder concretar aquel impulso nos lleva a buscar una manera de alimentar esa necesidad a través de imágenes que estimulen la excitación del ser.
Así pues, es menester de este ensayo no desligarnos de la razón. Caemos en la conclusión de que es algo humano la exaltación de los sentidos por lo erótico; no obstante, la pornografía ha extendido sus fronteras tal que resulta morboso y denigrante los distintos géneros que abarca. Ya desde esta opinión, compartida además por una gran mayoría, pueden distinguirse rasgos de lo apolíneo. De esta manera, el criterio del ser humano pone una barrera que distingue de manera muy diáfana lo erótico de lo aberrante, y le permite alejarse de lo hermético con el propósito de, por ejemplo, en el caso de la pedofilia no corromper a un menor de edad.
La contracara de este texto presenta otro problema ligado al mal aprovechamiento de la virtualidad hoy en día. El diálogo ha representado desde siempre para el hombre la herramienta primordial para su progreso, no obstante, los medios de comunicación no siempre le fueron favorables al ser humano. En la antigüedad los mensajes, las cartas y demás textos eran muy propensos a perderse pues el trayecto y la manera de viajar eran muy pobres para su seguridad. Sin embargo, con el transcurso de los años invenciones tales como el telégrafo y el teléfono han calado muy hondamente en el desarrollo humano. Pero en el transcurso de la última década el intercambio lingüístico por medio de sistemas informáticos ha representado un avance significativo en el accionar diario.
Así pues, el chat viene siendo una de las formas más sencillas de comunicación y a la que una gran mayoría tiene acceso por su bajo costo y el requerimiento de computadoras no necesariamente modernas.
A pesar de lo antes ya mencionado, esta postura enmienda una serie de conflictos que ha traído consigo este avance. Más allá de las ventajas que postule tal sistema, su advenimiento acarrea también peligros constantes a los cuales todo tipo de personas pueda verse atentado. ¿Pero como Hermes y Apolo intervienen en lo antes mencionado?
Pues bien, cuando nos aventuramos a descubrir nuevos mundos al sentarnos frente a un monitor y teclear e intercambiar mensajes con desconocidos, como en el chat público por ejemplo, existe un riesgo de entablar una relación amical, sentimental o lo que fuese con alguien que en el futuro nos pudiese hacer algun daño. Es pues, la omisión a tal riesgo que uno corre el plano apolíneo que irrumpe en nuestra mente. Sin embargo, las connotaciones apolíneas surgen del enmarañado universo de la razón y dicho impulso se ve frenado muchas veces por el miedo hacia lo desconocido. Es de esta manera como el conflicto tanto instintivo como lógico se hace presente en esta situación subsanando el frenesí hermético a aventurarse en la diversidad del carácter humano.
Hemos visto pues dos ejemplos netamente claros de la mítica lucha entre ambos polos humanos: la razón y el instinto. La distinción es clara, empero la coexistencia permanente de estos dos polos (Hermes y Apolo) es plenamente necesaria. Esto se debe a que el hombre es un ser humano instintivo pero que; sin embargo, requiere de una lógica que guíe su comportamiento para el desarrollo sostenido de la civilización. En otras palabras, la lucha entre ambas partes del ser refleja la necesidad clara por parte de ellas en que cada quien requiera la existencia de la otra. Lo hermético no puede vivir sin lo apolíneo dado que, citando el primer ejemplo, alguien que viva siguiendo sus instintos y extrapolando la visión erótica hacia lo denigrantemente pornográfico, solo será un energúmeno dedicado a procrear y a vivir sin sentido (desligando la visión antropomórfica en este contexto). Así pues, lo apolíneo requiere también de lo hermético pues el ser humano pensante, analítico y razonable no valdría de nada dado que su impulso procreador no se vería estimulado, y por ende la preservación de la especie humana se extinguiría, dejando frágiles atisbos de una civilización meramente lógica.
Ciclovía de las experiencias
Descubrí el poder de las bicicletas a los seis años, cuando mi mejor amigo pensó que sería buena idea enseñarme a montarlas sentándome en una y dejándome caer por una pendiente (no muy inclinada, pero para un niño de esa edad es prácticamente como la bajada a la Costa Verde). Una vez que vencí el miedo a las caídas (las cuales, he de agregar, eran excesivamente frecuentes) nos dedicamos a pasearnos primero por la cuadra, después por la manzana y más adelante por zonas más alejadas dentro de la urbanización. Esta época de “bicicleteadas” duró hasta mis diez años, cuando me mudé a una zona más húmeda de Lima y mi “bicla” se convirtió en óxido, inutilizable. Mis paseos se convirtieron en cosa del pasado y lo que quedaba de mi bicicleta apenas me permitía movilizarme hasta el colegio (situado a unas pocas cuadras de distancia de mi casa).
Cuando creí que mis días como ciclista estaban perdidos, mi tía fue lo suficientemente amable como para prestarme su bicicleta, la cual, de manera igualmente amable, rechacé no por miedo a las caídas, sino por miedo a la vergüenza. Durante meses permaneció la idea de no querer salir por las calles con una bicicleta femenina de color lila fosforescente, hasta que las ganas superaron el bochorno y me vi a mí mismo circulando las calles limeñas en una “bicla” hecha a la perfección (su ligereza me permitió incursionar en trucos nuevos y más complejos). Esto fue así por casi un año, hasta que mi tía se vio obligada a pedírmela de vuelta; pero lo que parecía ser un obstáculo resultó ser el empujoncito que me llevó a comprar una bicicleta profesional, con mejores cambios, mejores amortiguadores y mejor tracción; es decir, me llevó a lo que soy ahora (o lo que creo ser): un ciclista semi-profesional.
Actualmente he descubierto que el montar bicicleta se ha convertido en algo más que una mera afición, es un estilo de vida; es un método de aliviar el estrés, de mantenerme en forma y de descubrir lugares nuevos (al menos nuevos para mí). Una de las dos cosas que más me atraen del ciclismo es el riesgo; no soy una persona muy arriesgada, me atrevo a muchas cosas, pero no apuesto cosas que temo perder, lo cual cambia cuando monto bicicleta, pues me encanta sentir la emoción de tener cientos de carros pasando a mi lado y amenazando con chocarme si cometo el más mínimo error de cálculos. La segunda es la pasión de viajar por el mundo en bicicleta. Actualmente he recorrido distritos tales como Surco, La Molina, Miraflores, San Borja, San Isidro, San Juan de Miraflores, Chorrillos, Barranco, Jesús Maria, San Miguel y Surquillo, no de cabo a rabo, pero sí de rincón a rincón. Con estos pequeños logros en mente, planeo conocer el Perú entero en bicicleta, y más adelante ir a cada país del mundo y pasearme por los lugares que me sean posibles (no a todas partes porque la vida probablemente no me alcance). Y es por eso que elegí mi bicicleta, porque la computadora (y en este caso Internet) puede llevarnos a muchos lugares, pero es la bicicleta la que nos lleva físicamente ahí.
sábado, 5 de abril de 2008
Mírame a los ojos
jueves, 3 de abril de 2008
Una suerte de postulado euclidiano
Asumo que no soy el único hombre que al entrar a un salón de clases por primera vez observa a las personas que lo rodean, especialmente en busca de chicas que endulcen la mirada o que alegren un poco el hecho de asistir a una lección que podría no ser muy divertida. Siendo feliz víctima de este hecho, crucé miradas con una chica que luego me propondría conocer de una forma u otra, aunque nunca haya sido muy bueno en iniciar conversaciones. Noté, además, que tenía un amigo que pareció percatarse de mi mirada, pues me observó un buen rato (no logré ver la expresión en su rostro debido a los enormes lentes de sol que llevaba puesto), aunque no le di demasiada importancia. Un par de días después, mientras deambulaba por los pasillos de la universidad, crucé caminos con un amigo, quien iba acompañado por quien parecía ser el amigo de la chica que quería conocer; nos presentó y el chico de los lentes me dijo algo que tomé como una broma fuera de lugar: “Ya nos conocemos, desde hace mucho tiempo. De chicos fuimos al cine con nuestras mamás”. Esto, en un principio, me pareció tan trillado como si de repente una ardilla se me hubiese acercado para pedirme la hora, así que reí por compromiso, pero éste mencionó el nombre de la película (el cual no nombraré por motivos personales) y supe inmediatamente quién era. Efectivamente, años atrás, quizás diez u once, la prima de mi mamá y su hijo (mi primo segundo) nos invitaron al cine en una ocasión y, a pesar de ir a la misma escuela (él en un año menor al mío) no nos vimos nunca más… hasta ese día.
Tal vez no han logrado hacer la conexión, por lo que se los diré: no solo encontré a un familiar perdido con quien pasé una tarde más de una década atrás sino que también se abrió la posibilidad de conocer a la chica, su amiga, de manera más directa y simple. ¿Quién diría que sería mi primo, una persona que no veía en bastante tiempo y que con mucha facilidad podría decir que la vida trajo hasta mí, el que me presentaría a quien me propuse conocer? La única y simple respuesta es, y será siempre, la Vida y sus geniales Coincidencias.
Curvas y Desviaciones Literarias
miércoles, 2 de abril de 2008
El sentido de la vida: Algo para reflexionar
En este mundo se llama destino el fino hilo que nos ata, se enrosca alrededor de los prejuicios: Odio, tristeza todo acaba en lágrimas. Mas allá del velo, a la media noche, se consumará la venganza”Jigoku Shoujo.
Los hombres al nacer en una determinada de sociedad crecen y profundizan los valores de esta, estudian, se educan y se divierten bajo los valores de una determinada sociedad y una determinada religión. Pero, lo que muchas veces sucede es que estas personas van interiorizando los objetivos y los preceptos que te impone la sociedad y no llegan a un punto de quiebre donde pueden ver por sus propios ojos a donde quieren llegar. Siempre esta la sociedad como una especie de lente que te hace ver el mundo de una forma determinada y de esta manera no pueden alcanzar la realización personal. Cualquiera puede ser una “oveja” más en ese rebaño al que llaman sociedad y creer que estos ideales que te pone la sociedad son los tuyos y engañarte a ti mismo tratando de alcanzar metas vacías y sin sentido para la persona. Hay que eliminar los muchos prejuicios que te pueda imponer la sociedad, no vivir en vitrina usando experiencias ajenas sino experimentar uno mismo la vida y poder llegar a ser un pensador libre.
Basándome en lo que he dicho mencionare el pasaje de las tres transformaciones de el libro “Así hablo Zaratustra” de Friedrich Nietzsche. Primero el alma es como un camello, que lleva una gran carga en su espalda y camina por el desierto. Esto representa a un alma que carga con los antiguos prejuicios que lo atan a su antigua forma de pensar y no le permiten realizarse y progresar. Pero, llega un momento en que este camello se transforma en un león, que con su fiereza quiere luchar con los valores del pasado, este león se llama “Yo Quiero” y lucha contra un dragón de escamas brillantes que se llama “Tu debes”. El león debe vencer esto para poder vencer los valores del pasado y para llegar a la última transformación que es el niño. Pero, ¿Qué puede hacer el niño que no pueda hacer un león? El niño tiene la capacidad de reinventarse de vivir un mundo bajo sus propios valores y opiniones un mundo que es visto cara a cara sin obstáculos.
Este pasaje de las tres transformaciones refleja bien lo que yo quiero decir. Para poder encontrar el sentido de la vida hay que reinventarse, progresar, no quedarse estancado en un lugar, abandonar los prejuicios y los ideales de la sociedad para crear los propios y poder llegar a la realización. No tenerle miedo a la envidia ni a la derrota ya que estos dos sentimientos que son tachados como malos por las personas te impulsan a mejorar a querer mejorar para poder ser mejor que el otro en una competencia limpia.
Pero, es importante diferenciar las metas que te ayudaran a alcanzar la realización personal y los impulsos. Muchas veces las personas se dejan llevar por impulsos del momento sin medir las consecuencias, y esto separa a la persona de su verdadero objetivo. Si bien, Dios nos dio el libre albedrío, ese “Haz lo que quieras” no es dejarse llevar por tus impulsos sino que hay que pensar si eso te ayuda para cumplir tus objetivos o si en verdad te hace retroceder después de haber meditado esto se puede llevar a cabo un libre albedrío con total conciencia de lo que se esta haciendo ya que no hay vuelta atrás.
En conclusión, el sentido de la vida no se puede esperar sentado sino que ese sentido se lo da la persona mediante metas cortas que te llevan a la realización personal. El darle sentido a la vida, no es una meta sino es una vía para llegar a la realización personal mediante el cumplimiento de tus objetivos a corto plazo, realmente objetivos propios a los cuales te puedas dedicar a plenitud no importa cuales sean siempre y cuando realmente se deseen y te ayuden a reinventarte y a ser mejor persona.
Aquel que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los "cómos".
Friedrich Nietzsche